Toda esta gente pasó por acá

sábado, 29 de septiembre de 2007

Como en el 86


A casi 30 años del primer título, a 21 años de la consagración en México, Argentina volvió a consagrarse campeón mundial de fútbol. Esta vez fue en la 16° edición del Mundial de fútbol gay y lésbico, que finalizó hoy en el estadio de Defensores de Belgrano. Los Dogos (uno de los cuatro equipos que representaron al país en el torneo) derrotaron 1-0 a los ingleses de Stonewall, defensores del título, y se alzaron con la copa.


En realidad todavía no, porque la copa se las van a dar esta noche, en una fiesta en un boliche. Fue la primera vez que este campeonato se realizó en Sudamérica y la experiencia resultó altamente satisfactoria.



El gol fue anotado de cabeza por Maikon Monteiro, que tiene dos particularidades: es brasileño... y es heterosexual. Así es, en el Mundial organizado por la IGLFA (Asociación Internacional de Fútbol para Gays y Lesbianas) no hay restricciones a la hora de armar los equipos. Cualquiera puede jugar en cualquier equipo independientemente de su nacionalidad, condición sexual y sexo (sí, el reglamento permite a las mujeres participar en equipos de hombres).


La próxima cita será el año próximo en Londres, donde Los Dogos intentarán revalidar su conquista. Salud, entonces, a los campeones mundiales, y ojalá esto ayude a que la discriminación y el racismo desaparezcan del deporte, del país y del planeta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

hay que aclarar que por equipo pueden haber dos heterosexuales